De lo virtual a lo real

En las últimas semanas han sido varias las personas que me han hecho un comentario parecido. Al hablar sobre la proliferación de eventos y del aumento de posibilidades de «desvirtualizar» a quienes siguen en la red, varias de estas personas coincidían en el desfase entre la imagen real y la que estos dan en lo dospuntocero.

Ya sabemos que la percepción es la realidad. También sabemos que La Red te permite crear una imagen casi de laboratorio en la que puedes diseñar tu propio monstruo de Frankenstein online. Esa imagen se mantiene mientras no tengas que dar la cara. Pero antes o después deberás salir de tu castillo en dospuntocerolandia.

El Branding Personal se basa en la autenticidad. A una Marca Personal se le puede consentir un error pero no una mentira. Sin embargo, La Red es un medio muy tentador para quienes quieren crear un «alter ego» con las características que uno siempre hubiese soñado, pero falsas.

Supongo que esto da para muchas tesis sobre psicología, pero lo que a mi me interesa es el problema que supone el pasar de lo virtual a lo real.

Los negocios, los amoríos y los momentos de diversión y duelo se establecen en momentos reales, con gente a la que puedes tocar, pegar o acariciar. Si quieres llegar a algo más con un cliente, una chica o un chico, una audiencia o un amigo, debes dar la cara y mostrar lo que realmente eres. Ahí ya no vale tu avatar ni tu «propaganda» twittera. Ahí te enfrentas con una relación directa, personal y de más de 140 caracteres.

Todos conocemos personas que dan una imagen extrovertida en La Red pero que son más sosos que Winnie de Pooh cuando te los encuentras en un evento.

Vendemotos que te han contado por twitter que han cerrado siete proyectos antes de desayunar y que luego son unos muertos de hambre.


Supuestos gurús que parece que van a cambiar el mundo pero que son más aburridos que el Doctor Siesta y son incapaces de hacer que nadie mueva un dedo en una conferencia.

Expertos en «Socialmedia» que prometen hacerte rico en dos tardes pero que están viviendo con sus padres porque no pueden (ni quieren) vivir por su cuenta.

Iluiminados que dicen que van a convertirte en un superhombre o supermujer pero que no tienen ni idea de lo que ocurre «ahí fuera». Personas que lo que realmente ofrecen y venden es una forma de hacer sentir bien a personas que lo que buscan es algo para estar cómodos mentalmente, un couch (sofá) y no un coach.

Asesores personales que parece que han vivido siete vidas y que lo saben todo, pero que en realidad están muertos de miedo y necesitan que alguien les escuche a ellos y no al revés.

El caso es que tarde o temprano, tendrás que dar la cara, tendrás que salir de este mundo de Matrix que te has creado. Es en ese momento en el que se pondrá a prueba tu capacidad de dejar una Marca Personal. Cuanto antes salgas del cascarón del polluelo de twitter, cuanto antes dejes de piar y te pongas a gritar, acariciar, pegar o abrazar, mejor para tí y para tu Marca Personal.





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